martes, 8 de noviembre de 2011

EL MANUSCRITO DE AVICENA, de Ezequiel Teodoro

DATOS TÉCNICOS:

Título: El manuscrito de Avicena
Autor: Ezequiel Teodoro
Editorial: Entrelíneas Editores
ISBN: 978-84-9802-517-0
Páginas: 412




EL AUTOR:

Ezequiel Teodoro (Ceuta, 1971) ha cultivado el relato breve desde la adolescencia, publicando en una colección de relatos de la Escola d’Escriptura del Ateneu barcelonés y en diversas páginas literarias de Internet. Ha sido galardonado con el primer premio provincial de relatos cortos de Ceuta “Somos iguales, somos diferentes” y participado en distintas revistas de Ceuta tanto en su vertiente periodística como literaria, con la publicación de relatos y poesías.

Creador de la Asociación de prensa juvenil Jovepress, se hizo cargo durante tres años de un suplemento dominical de El Faro de Ceuta y de dos programas semanales de carácter juvenil y cultural en radio COPE Ceuta.

Desde que inició su andadura profesional como periodista, en 1995, ha trabajado en distintos medios de comunicación de carácter local y nacional, como El Periódico de Ceuta, COPE, El Faro de Ceuta, El Pueblo de Ceuta y la agencia nacional de noticias Europa Press, donde se hizo cargo de la sección de Cultura en Málaga y posteriormente de las de Turismo y Economía y Andalucía.

En los últimos años ha ejercido su profesión en el Gabinete de Prensa del Ministerio de Fomento.

El Manuscrito de Avicena es su primera novela.



ARGUMENTO:

(Madrid, 2011) El Doctor Simón Salvatierra, que vive sólo en una urbanización en las afueras de Madrid, emprende un viaje en coche hasta San Petersburgo, donde trabaja su esposa desde hace un año en un proyecto científico. Poco sabe del mismo, ya que respetando la cláusula de confidencialidad, ella nunca le ha contado nada al respecto.

El viaje transcurre con más lentitud de lo que en principio tenía pronosticado y cuando le faltan una treintena de kilómetros para llegar a Miranda de Duero (una de las etapas que tenía previstas efectuar), se detiene en una gasolinera para repostar y aprovecha para comer. A la salida descubre con perplejidad que las ruedas de su vehículo están deshinchadas y mientras busca en la guantera la póliza del seguro, es abordado y agredido por unos desconocidos, siendo socorrido por un joven que manifiesta ser auto-estopista y al que se ofrece a llevar a su destino siempre y cuando testifique ante la Guardia Civil los hechos que acaban de acontecer.

Pero éste no será el único percance que sufrirá a lo largo del viaje, en el que descubrirá que su acompañante, Javier Dávila, no es la persona que dijo ser, así como que el objeto de la investigación en la que trabaja su esposa consiste en analizar e interpretar un manuscrito que en su día elaboró el médico de origen persa Avicena, en el año 999 de nuestra era. Pero en el laboratorio sólo tienen una copia. El doctor, con la ayuda de Javier, tendrá que buscar el original y entregárselo a la organización terrorista Al Qaeda, que tiene secuestrada a su esposa, Silvia Costa.

(Londres, 2011) Alexandra Anderson (Alex), descubre con estupor que unos intrusos han entrado en su domicilio y que han revuelto todas las habitaciones, vaciados todos los cajones y desperdigado los enseres y efectos personales por el suelo, dejando la vivienda “patas arriba” y la alarma averiada, por lo que decide ponerse en contacto con Scotland Yard.

Aunque aparentemente todo parece un acto vandálico sin más, al día siguiente el inspector Jeff Tyler decide transmitírselo personalmente. Queda con ella en una cafetería próxima a su domicilio, pero Alex no se presenta, por lo que acude al domicilio, donde la encuentra prácticamente inconsciente. Descubre que ha sido agredida por dos personas que se han hecho pasar por empleados de la compañía de seguridad del edificio y que en la casa han introducido un dispositivo espía de alta gama. Decide entonces que la joven corre peligro y tras descartar varias posibilidades, decide llevársela a su casa, pues corre un riesgo incuestionable…

Fuente: Wikipedia
(Bujará, Persia, 999) Tras una grave enfermedad que ha tenido postrado en cama al emir Nuh II, éste se siente en deuda con Ibn Sina, quien ha sido capaz de sanarle, después de que los médicos de la corte se declarasen incapaces. Como compensación, le ofrece cualquier bien que desee y el joven, que entonces sólo tiene 17 años, le pide tener acceso a la biblioteca real.

Ibn Sina (Avicena) pasará dos años aprendiendo y memorizando los fondos bibliotecarios, para después elaborar un manuscrito, que entregará a su ayudante para su custodia.

  


IMPRESIONES:

Esta novela se presentó en abril de este año, tres semanas antes de la muerte de Bin Laden (1 de mayo de 2011) por un operativo militar estadounidense. Por ello, resulta, cuanto menos curioso, que este intento de ataque a Occidente por parte de la organización terrorista, sea llevado a cabo por su sucesor, Ayman al-Zawahiri, convertido ahora en líder. Aunque en el Prefacio de la novela asistimos al momento en que se gesta la operación, cuando Bin Laden y su sucesor huyen a través de una extensa red de galerías en las montañas de Kunar (Afganistán, 2002) tras el ataque sorpresa realizado por el ejército de la Alianza Norte (Frente Islámico Unido por la Salvación de Afganistán) en su intento por derrocar al régimen talibán:

“- ¿Cómo llegó a ti?
Aymán se detuvo en los ojos de su jefe. No era la primera vez que le hacía esa pregunta.
- Hermano, confía en mí.
Osama hizo el ademán de contener sus pasos aunque siguió caminando. Aymán sonrió. Desde la primera vez que le habló del poder no ha habido momento en que esa pregunta no rondase entre los dos; Aymán, sin embargo, mantuvo su silencio terco todo este tiempo.
- Hermano, si lo tenemos de nuestro lado los infieles no encontrarán dónde esconderse. ¿Te hace falta más?
Su jefe gruñó un no fatigado.
- Osama, tú proporcióname los recursos y yo te entregaré a Occidente.”


“El manuscrito de Avicena” es un libro a medio camino entre el thriller policiaco y la novela histórica, donde no faltan aventuras y en la que el amor sobrevuela durante toda la trama. La novela se cimenta en dos ejes, dos momentos históricos muy bien definidos. Por un lado, en la época actual, la historia principal comienza cuando el doctor Simón Salvatierra emprende un viaje en coche (tiene aerofobia) desde Madrid hasta San Petersburgo. Asimismo, hay una historia secundaria protagonizada por Alex Anderson (hija de uno de los científicos que trabajan en San Petersburgo) y el inspector Jeff Tylor. En ambas historias los personajes viven en continua amenaza por sendas células de Al Qaeda y por las diferentes centrales de inteligencia internacionales, en particular, el M16.

Fuente: Wikipedia
Por otro lado, la otra historia transcurre en el Emirato de Bujará, durante la Edad Media, y tendrá a Ibn Sina (Avicena) como protagonista indiscutible junto con su manuscrito y el camino que éste recorrerá a lo largo de los siglos, para llegar a nuestros días. Asistiremos a sus larga jornadas en la Biblioteca Real de Bujará, a la que acudía poco antes del alba y se retiraba al anochecer y donde adquirirá una vasta formación:

“Libros de papel árabe, rollos de papiro egipcio, bronces cuneiformes babilonios, pergaminos de atirantada piel, tablillas de junco chino. Decenas de miles de ejemplares, quizá centenares de miles, se amontonaban sobre estanterías de blanco abedul a lo largo de las paredes de la sala. Una docena de estudiosos leía o escribía en cuatro mesas dispuestas a un lado de la habitación.

Ibn Sina recorrió con lentitud algunas de las estanterías. Bajo su atenta mirada pasaron obras de Plinio, Séneca, Catón, Cicerón, Al-Farabi, Ibn Isaac, Hipócrates, Galeno, Platón… 

Al acabar, se arrodilló en mitad de la sala y lloró”. (página 102).


Dos años después se había leído todos los libros de la biblioteca, incluidos aquellos escritos en lenguas desconocidas, ya que en ese caso las aprendía y entonces escribió este documento que poseía un inmenso poder, ya que su portador podría ser capaz de salvar o destruir a la humanidad, el cual entregó dentro de una bolsa, en un sobre cerrado y lacrado a su ayudante El-Massihi diciéndole:

“- Quiero que la guardes. No pretendas mencionarme nunca donde. Nadie debe saberlo, ni siquiera yo mismo. Es más, si algún día te la reclamo pregúntame el motivo, y si no estás convencido tampoco me la entregues a mi.

El-Massihi la cogió y la puso en su bolso de médico.

- ¡No! Nunca debes llevarla encima… Eres la única persona en la que confío verdaderamente.

- ¿Puedo saber qué…?

- No me pidas eso. Es mejor que seas ajeno a su contenido”.


Pero tanto en un momento histórico como en otro, llama poderosamente la atención la gran cantidad de personajes, tanto reales como ficticios, que intervienen, con personalidades muy marcadas y que, cada uno de ellos a su manera, participan en el desarrollo de la trama.

Independientemente de que hablamos de personajes de ficción, éstos son totalmente creíbles, en base a la información que el autor nos aporta sobre ellos, bien a través de los diálogos, bien por medio de descripciones. Resulta curioso, por ejemplo, que los personajes que intervienen en la época actual (Salvatierra, Javier Dávila, Alex Anderson y Jeff Tyler)  parecen nadar en un laberinto existencial, de difícil solución, mientras que muchos de los que aparecen en la edad antigua, como Hasan As-Sabbah, uno de los discípulos de Avicena que a la muerte del médico es tan sólo un niño, tienden a ser misteriosos, por no citar al sucesor de Bin Laden, que resulta diabólico.

También quiero hacer hincapié en que Avicena no es el único personaje histórico al que se alude en la novela, aunque es indudable que juega un papel fundamental, porque el manuscrito a lo largo de los siglos es confiado a una serie de personas que viven momentos especiales. Ya sabemos que el primer guardián fue El-Massihi y de éste pasó a su nieta Zaida. Pues bien, por ejemplo, se cita a un famoso caballero de la Edad Media española cuyo nombre no vamos a desvelar, ya que su sobrino se halla en Jerusalén, embarcado en la primera Cruzada para salvar su alma, atendiendo a la llamada del Papa Urbano II en el Concilio de Clermont, donde arengó a la multitud con estas palabras: “"Vosotros, los que habéis cometido fratricidio -decía el Santo Padre-, vosotros, los que habéis tomado las armas contra vuestros propios padres, vosotros, los que habéis matado por paga y habéis robado la propiedad ajena, vosotros, los que habéis arruinado viudas y huérfanos, buscad ahora la salvación en Jerusalén. Si es que queréis a vuestras propias almas, libraos de la culpa de vuestros pecados, que así lo quiere Dios...", pues será él quien rescatará el pergamino al salvar durante la Toma de Jerusalén a Zaida de una muerte segura por parte de Hasan As-Sabbah.


AMBIENTACIÓN:

La ambientación es determinante, con descripciones exactas y precisas, contenidas en una técnica narrativa sin desmayo. Es indudable que el trabajo de documentación ha sido exhaustivo, en particular a la hora de pormenorizar los escenarios. Para que os hagáis una idea y por poner un ejemplo, me ha maravillado la manera en que nos explica el interior del Palacio del Emir, concretamente sus aposentos:

“Al atravesar la entrada se abría un amplio jardín al aire libre con palmeras, granados y almendros en flor, que despedían un olor fresco e intenso; a un lado, un pasillo abovedado conducía a una pequeña puerta forrada de cobre y, detrás, un corredor de celosías blancas y azules daba paso a una habitación cuadrangular de unos veinte codos de lado. Ibn Sina pensó que debía ser la antesala a la habitación principal del emir. En aquel aposento esperaban, en bancos de cedro adosados a las paredes, diez o doce personas…”.

“En el interior, en el centro de la habitación, el emir gruñía en su letargo febril sobre un lecho de caoba africana de tintes rojizos, rematado por un dosel de marfil con inscripciones del Corán; a su alrededor, desde cuatro pebeteros de bronce, ascendían volutas de humo perfumados.”

Pero este dominio de la técnica descriptiva tiene el mismo vigor a la hora de describirnos una batalla, como la que se libró en Jerusalén o la visita al Hermitage, por poner dos ejemplos absolutamente dispares entre sí, ya que en ambos, el autor no sólo nos describe las situaciones dotándolas de fuerza expresiva, sino que también transmite, como pocos, las emociones de los personajes. Lógicamente, evita las grandes parrafadas y las construcciones gramaticales complejas.

Otro ejemplo sería el del ambiente tenebroso y oscuro que el autor nos describe cuando llegan a Valdeande, un pueblo deshabitado y misterioso. Y se aprecia que conoce el pueblo palmo a palmo, la iglesia o el museo, ya que es el lugar donde se encuentra el manuscrito y que para dar con él tendrán que resolver una serie de enigmas. El este sentido, la experiencia como historiadora de Alex será definitiva.

El estilo es claro, directo, con un lenguaje ágil y funcional. Combina con maestría las descripciones con unos diálogos muy bien construidos. Responde perfectamente a la estructura del triller policiaco, que utiliza de la forma más refinada posible y por su ritmo trepidante que no decae en ningún momento.

La historia está contada en tercera persona, con un narrador que en ocasiones es equisciente, en otras, deficiente, hasta el punto de confundirnos en algunos momentos, sobre todo al principio, cuando damos por hecho que el doctor Salvatierra emprende su viaje a San Petersburgo con la única intención de visitar a su esposa, a la que no ve desde hace un año y, sin embargo, su intención es la de solventar su posible secuestro.


CONCLUSIÓN:

Creo que llegados a este punto, no os cabe ninguna duda acerca de mis impresiones sobre la novela, porque me ha encantado. Considero que es una lectura de lo más recomendable para aquellos que disfrutan de la novela de aventuras, ya que está muy bien construida y de la histórica en particular, ya que profundiza en la vida de Avicena, el “Príncipe de los Sabios”, según sus discípulos, una persona adelantada a su tiempo, con una personalidad excepcional.
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7 comentarios:

  1. Me has convencido totalmente con esta estupenda reseña.
    No paro de ver en facebook cosas de esta novela pero no había leído ninguna reseña. Ni qué decir que me la apunto ya que me encanta la novela histórica y el thriller policíaco. Si la ambientación es tan buena y encima hay una pizca de amor, estoy segura de que me va a gustar.
    Besos

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  2. Kayenna, me ha gustado mucho tu reseña. Estoy deseando leer el libro.
    Un beso

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  3. Qué buena pinta, después de leer tu reseña tan completa imposible no animarse a leerla, además me atrae el tema y que esté bien ambientado, me lo apunto sin duda, creo que me gustará
    un beso!

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  4. Creo que esta novela me gustará seguro, porque además vimos cosas sobre Avicena en la asignatura de historia del libro en la carrera, así que igual habrá cosas que me resulten familiares.

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  5. La tengo prevista para pillarmela esta navidad, estoy viendo la priomoción que hace el autor y me llama bastante...

    Un abrazo!!

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  6. Interesante novela Kayenna, tienes un bonito espacio.
    un abrazo.

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  7. Magnifica reseña, me ha gustado tanto que he decidido darme un capricho y comprarme la novela.
    Saludos

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